Las siestas son esenciales para los niños, ya que aportan un periodo de descanso diurno que son esenciales para un adecuado desarrollo. Hacia los tres meses de vida, los bebés empiezan a diferenciar cuándo es de noche, lo que suele conllevar que durante el día pasen más tiempo despiertos. ¿Hasta qué edad es normal que duerman la siesta? ¿Influyen las siestas en el descanso nocturno? ¡Descubre todo sobre las siestas en la infancia en este episodio de Sin cita previa!